Aplastamiento histórico del Terrassa FC-Bonaire al CD Enpie Málaga, la sección de fútbol playa del CD Málaga. Las egarenses remontaron un 2-0 adverso y arrasaron por 4-10 a las blanquiazules. Sin piedad, con brillantez y elegancia, con un golazo de ensueño de escorpión de Abad. Con técnica y con furia, vengando poéticamente un episodio futbolístico de 25 años atrás.
Y eso que el partido comenzó cuesta arriba, ya que en los minutos 2 y 6 las malacitanas sorprendieron a las egarenses. No obstante, Abad, inspiradísima, acortó distancias también en el minuto 6, empató en el 8 y Andrea, en el 10, volteó el marcador. Final del primer tiempo, y 2-3 en Huelva. En cuatro minutos la clase y la fe del Terrassa FC-Bonaire habían obrado una especie de milagro solo al alcance de las elegidas, las campeonas europeas.
Pero lo mejor estaba por llegar. A los 13 minutos, Maria volvió a marcar para las terrassistas. Adriana, de cabeza, marcó el quinto en el minuto 18. El Málaga cavó su tumba en el minuto 21, cuando marró un penalti. Andrea, en el 23, estableció el 2-6, y las andaluzas acortaron distancias. Serrat puso orden también en el minuto 23. Con 3-7 se llegó al final del segundo período.
El tercer tiempo reflejó la ambición insaciable de un Terrassa FC-Bonaire excelso. Rañé, Vigara, Teruel, Verónica y Doblas han inculcado el equipo una continuidad y una tenacidad propias del campeón de Europa, de ese terrassismo ganador e imparable. Y cada jugadora es una pieza necesaria para un engranaje infalible. Manau, un portento de facultades físicas y técnicas, visitó la cazuela en los minutos 25 y 26. 3-9. Las malagueñas lanzaron a la madera a continuación. Y el zenit, el delirio, la magia, llegaron en el minuto 30. Maria Abad se inventó, cual malabarista circense, un escorpión imposible que besó las mallas por la escuadra del Málaga. Un gol de fantasía. Una diana de dibujos animados, de metaverso, de 3D, de realidad virtual y aumentada. Un gol eterno, inimitable, transtemporal. Abad homenajeó al fútbol playa. Y el fútbol playa se enamoró para siempre de Abad.
Hasta el final, las malagueñas maquillaron el resultado y el Terrassa FC-Bonaire mostró su versión de control ante un rival que hincó la rodilla. La versión de un líder que suma 9 victorias y un empate en 10 jornadas, lo que arroja 28 de 30 puntos en litigio y un balance goleador de 47-20. El Turia de Valencia, segundo, pinchó (2-2 ante el Pozoalbense), y se queda con 25. ¡Qué bonito es ser terrassista!
